Las brechas de seguridad ponen de manifiesto la importancia de proteger la información corporativa de un negocio, a riesgo de pagar un alto coste financiero y reputacional. Según datos del INCIBE, en 2024, un 32,4% de los ciberataques (que suponen un total de 31.540 incidentes) fue dirigido a empresas, incluyendo pymes, micropymes y autónomos.
Especialmente importante hacer mención al 99% del tejido empresarial en España: las medianas y pequeñas empresas. La ciberseguridad no está reñida con el tamaño de una empresa, aunque en ocasiones la falta de tiempo, inversión y equipos especializados sean factores determinantes. Cualquier empresa con una presencia online puede ser objetivo de un ciberataque y cualquier dispositivo conectado a Internet representa un riesgo potencial de entrada para atacantes. Las pymes deben reconocer esta vulnerabilidad y priorizar su infraestructura de seguridad.
Los riesgos en seguridad del teletrabajo
Además, muchas pymes tienen modelos de trabajo en remoto o híbrido, que generan ciertos riesgos. Cerca de un tercio de todos los correos electrónicos empresariales contienen contenido malicioso. Si un empleado accede a sus datos empresariales desde un dispositivo personal, en una red de Wi-Fi pública y sin usar métodos de comunicación seguros, como una VPN o redes superpuestas, se expone a un riesgo de ataque significativo. En este sentido, es importante incorporar prácticas seguras de uso del correo electrónico y métodos de conexión fiables, así como mantener una vigilancia constante, sin importar desde dónde se trabaje ni qué dispositivo se utilice.
Al mismo tiempo, cada vez más ataques se realizan gracias a la Inteligencia Artificial Generativa, que favorece la expansión de amenazas más sofisticadas y escalables que nunca. La IA puede automatizar ataques, haciéndolos más rápidos y difíciles de detectar. Las pymes deben mantenerse vigilantes y preparadas ante esta tendencia. Sin embargo, aunque pueda sonar alarmante, las mejores empresas de ciberseguridad también están invirtiendo en IA con fines positivos, utilizando ese mismo poder escalable para detectar y reducir riesgos a una escala sin precedentes.
La importancia del modelo de Confianza Cero (Zero Trust)
La Confianza Cero es un marco de seguridad que implica que cada intento de acceso ya sea interno o externo, debe ser evaluado y verificado repetidamente. Cada solicitud, ya provenga de un usuario o de un dispositivo, debe ser autenticada, autorizada y validada de forma continua. Este es un principio que todas las empresas deben conocer, ya que garantiza que, incluso si un atacante logra acceder a una parte de la red, no podrá moverse fácilmente por el entorno. Al seguir los principios del menor privilegio y de confianza cero, una empresa puede reducir significativamente los daños potenciales de una brecha de seguridad. Para una pyme, esto es sumamente importante, ya que, debido a sus reducidos recursos, es menos probable que pueda sobrevivir al impacto financiero de un ciberataque.
La Confianza Cero ayuda a proteger los activos de una pyme, de forma asequible y sensata, permitiéndole crecer sin comprometer su seguridad. Desde Hornetsecurity creemos que es muy importante la formación continua en concienciación sobre seguridad, ya que los empleados son el verdadero cortafuegos en un momento donde los ataques cada vez son más complejos y pueden pasar desapercibidos. Ahora es más importante que nunca construir una cultura empresarial consciente de la seguridad, tanto si se trata de una micropyme como de una empresa consolidada.
Si a esta concienciación de los empleados para detectar intentos de phishing, comprender buenas prácticas y reconocer comportamientos de riesgo, se le añade la implementación de tecnologías de ciberseguridad robustas, se reducen significativamente las posibilidades de que un tercero pueda acceder a la información crítica o confidencial de una empresa.
La ciberseguridad es una parte fundamental del crecimiento sostenible de una empresa. Las pymes que la priorizan pueden hacer crecer su negocio con la confianza de que están protegiendo sus datos y su futuro. Y más cuando los ataques generados por la IA van en aumento. Invertir en seguridad ya no debe verse como algo opcional para una pyme, es una prioridad totalmente esencial y estratégica.